Alergia a la proteína de leche de vaca (APLV), lactancia materna y pautas nutricionales - Entrevista nutricionista

Alergia a la proteína de leche de vaca (APLV), lactancia materna y pautas nutricionales - Entrevista nutricionista

La alergia a la proteína de leche de vaca es una de las alergias más comunes en la infancia, y suelen aparecer de bebés y en padres primerizos, donde asaltan dudas sobre la alimentación de la madre, del bebé, de la lactancia y de la alergia, en general. Andrea es una nutricionista originaria de Chile que tuve la suerte de conocer dado que su profesión la ejerce siendo alérgica diagnosticada de adulta, por lo que puede llegar a entender mucho mejor a sus pacientes.

He contado con ella para entrevistarle sobre este tema tan interesante y que tanto puede aportar a los Alérgicos a la Proteína de Leche de Vaca  (en adelante APLV) recién diagnosticados y sus familias. Espero que, tanto su experiencia como sus conocimiento puedan darte las claves para sobrellevar esta alergia tan común.

¿Me acompañas?

Si quieres ir más rápido... 

  • ¿Cómo fue tu experiencia con el diagnóstico de tus alergias de adulta? ¿Te ayudó el hecho de ser nutricionista? 

La verdad fue un mundo absolutamente nuevo para mí. El diagnóstico de mi alergia alimentaria, se hizo cuando yo tenía 27 años (ahora tengo 29); por ende llevaba una vida comiendo de todo, y de un momento a otro, mi alimentación cambió por completo. Comencé a leer, a buscar y a querer conocer más del mundo de alérgicos. Ser nutricionista definitivamente me ayudó, fue más fácil comprender lo que podía y no podía comer, las reacciones que fui teniendo y sin saber qué hacer. Posteriormente, pude especializarme en Enfermedad Celíaca, Intolerancias y Alergias Alimentarias. Definitivamente fue más fácil el camino que si no hubiera sido nutricionista.

  • ¿Sentiste apoyo por parte de tu entorno? ¿Qué es lo que más costó?

De mi familia nuclear (papá, mamá y hermana) sí. Al principio mi hermana y mi mamá eran las que estaban más pendientes de qué podía y no podía comer. A mi papá le costó entenderlo, pero finalmente lo asumió. Ya tengo mi propio sartén para cocinar, mi propia tabla de madera y eso no se mezcla con lo demás. Cuando hacemos asado (carne, cerdo, pollo, etc), siempre separa el cerdo y el pollo que son las proteínas que puedo comer, de la carne de vacuno que es la que me da alergia. A pesar de que cuesta, la familia siempre termina apoyándote. 



  • ¿Te ha costado mucho llevar una vida normal, cuando ya estabas acostumbrada a otras cosas? ¿Cómo has hecho que sea más fácil?

Al principio sí, fue difícil ver que ya no iba a poder comer ciertas cosas, pero al ver la reacción que tenía, que era básicamente respiratoria, 10 a 15 minutos después de consumir el alimento en cuestión, ya no me daban ganas de comer esas cosas. Era como un poco de terapia del terror, porque ya sabía que podía pasar si me salía de la dieta sin alérgenos. He adaptado mi alimentación a cosas que no me hacen daño, y sé que prácticamente todo puede ser hecho con sustituto de huevo y agar agar. En cuanto a las proteínas animales, hay veces que si extraño comer huevo frito o carne con verduritas, pero después digo: al menos puedo comer cerdo y pollo, y esas ganas desaparecen. Trato de leer absolutamente todas las etiquetas de los alimentos ultraprocesados antes de comprarlos. He ido descubriendo en el camino que hay pasta de trigo sin huevo, que fue un gran hallazgo porque la pasta de arroz definitivamente no va conmigo. Y así lo llevo, pasito a pasito, cuidando de no caer en ninguna contaminación cruzada. Si voy a un restaurante, pregunto todo lo que trae el plato, y generalmente seguimos yendo a los mismos restaurantes, entonces ya me conocen y cuando pido un plato “sin carne de vacuno” saben que tengo alergia y no tienen problemas en adaptarlo a mis necesidades. 

  • ¿En qué momento de nuestra vida se puede desarrollar la alergia a la proteína de leche de vaca? ¿Es  frecuente? 

Un ser humano no puede desarrollar alergia a un alimento al que no ha sido expuesto. Por ende, la APLV se desarrolla o se muestra cuando el niño es expuesto a la leche de vaca. Esto puede suceder directamente, es decir, se le dio al niño una fórmula maternizada que es a base de leche de vaca, o indirectamente, cuando la madre consumió leche de vaca, y las proteínas pasaron a través de la leche materna. Lamentablemente, es una de las alergias que más se está repitiendo, al menos en Chile de 2 a 3% de los menores de 3 años tiene APLV.  Y el gran problema, es que los niños APLV no siempre son solo alérgicos a la proteína de leche de vaca, si no que también a otras proteínas alimentarias, lo que hace más complejo su manejo. 



  • ¿Existen factores que influyen en el desarrollo de la alergia a la proteína de leche de vaca? ¿Quiénes lo desarrollan?

Si es que se sospecha de APLV, es importante conseguir la mayor cantidad de información por parte de la familia del paciente. Una historia clínica completa y un examen físico, deben ser llevados a cabo por un profesional que sepa buscar los signos que trae este tipo de alergia. El riesgo de atopia obviamente es mayor si uno de los padres o un hermano gemelo tienen alergia. Y ese riesgo aumenta aún más, si ambos padres presentan algún signo de alergia. No necesariamente alergia alimentaria, pueden ser pacientes con asma alérgico, rinitis alérgica, dermatitis atópica, etc… pero, no hay signos específicos que nos hagan decir, “sí, este paciente presenta dicha condición, es porque tiene APLV”. Es un diagnóstico más bien complejo.

Las alergias en general se desarrollan cuando una persona tiene una reacción adversa contra la proteína de un alimento. Se produce, porque existe un quiebre en lo que llamamos “tolerancia oral”. Lo normal es que uno coma de todo tipo de alimentos, y el intestino no los identifique como extraños. Pero en el caso de los alérgicos, el intestino reacciona y genera anticuerpos contra esta proteína alimentaria, llevando a todos los síntomas de alergia. 

En el caso de la APLV, el diagnóstico a veces depende mucho de los órganos a los que afecte. Los síntomas comienzan a aparecer a las pocas semanas de introducida la leche de vaca. En un 50 a 60% hay presencia de síntomas gastrointestinales, 50% a 60% síntomas en piel, 20 a 30% en tracto respiratorio, y puede comprometer a más de un sistema a la vez. Se estima que hay un 0,8 a 9% de anafilaxia en pacientes APLV, pero depende de que tipo sea su reacción (mediada o no por IgE o mixta). 

Es importante decir, que la lactancia materna es uno de los más grandes protectores en cuanto a alimentación de un lactante se trata. Y no existe suficiente evidencia científica para decir que se deben evitar alimentos en el período de gestación, y así evitar el desarrollo de alergia alimentaria. 

  • ¿Cuáles son las etapas en las que se puede dar  el diagnóstico APLV y qué hacer en cada caso?

En Chile, el Ministerio de Salud, creó una guía para el manejo de pacientes con sospecha de APLV. Existen dos caminos. Si el lactante está con Leche materna o si el lactante por cualquier razón debió ser alimentado con fórmula maternizada. También están bien definidos que síntomas se consideran leves y cuales severos. 

  • Para pacientes con síntomas tales como vómitos, que no se asocian a reflujo gastroesofágico fisiológico, diarrea, rectorragia leve (estrías de sangre en deposiciones), constipación (dificultad para defecar), cólicos abdominales de al menos 3 horas, 3 días a la semana, en un período mayor a 3 semanas e irritabilidad general, se está hablando de síntomas leves a moderados en un paciente con sospecha de APLV

  • Pero, para pacientes con síntomas tales como mal incremento de peso y talla, por las diarreas constantes o vómitos, rechazo alimentario, rectorragia con anemia secundaria a esta pérdida de sangre, albúmina en sangre baja, enterocolitis alérgica severa, dermatitis atópica moderada a severa, se estaría hablando de síntomas severos.

Entonces, si una madre empieza a dar Leche Materna y su bebé presenta síntomas leves a moderados, la recomendación es la dieta de eliminación de Leche de Vaca por parte de la madre, de 2 a 4 semanas. Si los síntomas mejoran, debe reintroducir la leche de vaca a la semana 4. Si los síntomas no vuelven a aparecer, se descarta el diagnóstico de APLV y se mantiene al paciente en seguimiento. Pero si los síntomas vuelven a aparecer, se confirma el diagnóstico. Pero, si el bebé presenta reacciones severas, la dieta de eliminación debe ser absoluta y estricta por parte de la madre, y no se hace reintroducción de leche de vaca, hasta que el bebé sea evaluado por un especialista. 

En el caso de que el bebé no pueda haber sido alimentado con leche materna, se habrá comenzado a alimentar con fórmulas maternizadas en base a leche de vaca. Si presenta síntomas leves a moderados, se le da una fórmula extensamente hidrolizada por 4 semanas. Si los síntomas mejoran, se reintroduce la leche de vaca y se evalúa. Si vuelven los síntomas se confirma el diagnóstico de APLV, y si no, se descarta ese diagnóstico y se hace seguimiento del paciente. Pero si el paciente presenta síntomas severos, se le cambia la fórmula a una de tipo aminoacídica, y se envía al especialista sin reintroducción de leche de vaca. 

  • ¿Cómo debe ser la alimentación en los casos de APLV durante la lactancia materna? ¿Se debe dejar la lactancia?

La alimentación de las madres que estén dando leche materna y tengan un bebé con APLV debe ser estricta sin este alérgeno, pero también debe estar libre de soya (por la posible reacción cruzada) y libre de caseína (que proviene de la leche). En general, la alimentación de una madre que solo deba ser libre de proteína de leche de vaca, permite bastantes alimentos. La complicación viene cuando el paciente sufre de más de una alergia, ahí es cuando se vuelve un desafío recomendar que tipo de dieta se debe llevar. 


A grandes rasgos la madre de un paciente APLV puede comer:

  • Cereales: Arroz, pasta que no contenga soya ni leche, papas, mandioca o yuca, alforfón, avena (que no esté contaminada con leche), choclo o maíz, arvejas, habas, quinoa. Pan que no sea elaborado con leche, manteca, mantequilla o soya. Panes elaborados con aceite si se permiten. Porotos o frijoles, lentejas y garbanzos.

  • Verduras frescas: Todas, excepto los brotes de soya y cualquier otra que pudiera estar contaminada con soya. 

  • Frutas frescas: Todas.

  • Alimentos que sustituyen la leche: Bebidas de arroz, coco, avena. Pero hay que recordar que estos alimentos jamás tendrán la concentración ni biodisponibilidad de calcio que tiene la leche de vaca, por lo tanto se les suplementa ese mineral.

  • Embutidos sin leche, caseína o soya.

  • Carne de vacuno, cerdo, pollo, pescados, mariscos. Todo sin marinar.

  • Enlatados que no contengan leche, caseína o soya.

  • Huevos

  • Aceites vegetales, de oliva, canola, pepita de uva, coco, maravilla.

  • Frutos secos. Pero hay que tener cuidado con pacientes alérgicos múltiples, para evitar cualquier tipo de reacción que pueda ser confundida con APLV.

  • Aceitunas que no tengan trazas de leche, caseína o soya.

  • Palta o aguacate.

  • Agua envasada, agua de la llave, té, café (dependiendo de cada caso). 

Creo que lo más importante que hay que resaltar es lo siguiente: NO SE DEBE DEJAR LA LACTANCIA MATERNA por ningún motivo. Hay que pensarlo de la siguiente manera. La lactancia materna es un líquido vivo, además de macro y micronutrientes, aporta factores de inmunidad que las fórmulas no aportan, por ende, siempre será mejor la leche materna en comparación a cualquier tipo de leche, por que no existe comparación entre ambas. Mínimo dar lactancia materna exclusiva por 6 meses, pero si pueden extenderlo hasta los 2 años, sería ideal.

  • ¿Influye el consumo de leches de fórmula o alimentos en el desarrollo de la alergia a la proteína de leche de vaca?

Depende. Como dije anteriormente, un ser humano no puede desarrollar una alergia a un alimento al que no ha estado expuesto. Pero, a través de la leche materna puede haber estado expuesto a PLV, su intestino reaccionó y generó síntomas de alergia. Así como también al estar en contacto con fórmulas maternizadas, puede generar síntomas. No necesariamente un bebé que tome fórmula desarrollará sí o sí APLV. 

En cuanto a los alimentos, el único alimento capaz de producir APLV es la leche de vaca. Y un niño no puede exponerse a otro alimento que no sea leche materna o fórmula maternizada hasta los 6 meses de edad, por lo tanto deberíamos habernos dado cuenta antes que empiece a comer a los 6 meses, que presenta esta alergia. 

 

  • ¿Por qué se recomienda dar a los bebés fórmulas sin lactosa?

Esto es un error que pasa más de alguna vez en la vida. La intolerancia a la lactosa es una intolerancia a carbohidratos. En el intestino, los enterocitos o células intestinales, tienen dentro de sus receptores las enzimas capaces de romper los enlaces de las diferentes cadenas de hidratos de carbono, en este caso la lactasa que es la enzima que divide la lactosa en galactosa y glucosa. En el caso de la intolerancia a la lactosa, hay una falta de esta enzima, por diferentes razones. Pero, no tiene un componente inmunológico de por medio. Es decir, el bebé intolerante a la lactosa, genera distensión abdominal, gases, diarrea, pero es por que su intestino no es capaz de manejar la lactosa porque le falta esa enzima. 

En el caso de un paciente APLV, es una patología que activa mecanismos inmunológicos. No se trata de que falte una enzima para digerir la lactosa, si no que se genera una cascada de reacciones inmunes ante la presencia de proteína de leche de vaca a nivel intestinal. Es por esto, que darle fórmulas sin lactosa a niños con APLV es incorrecto, y puede generar un daño enorme para el paciente. 

  • ¿Debe seguir el paciente APLV las pautas por sí solo?

Claro que no. El paciente APLV y su familia, deben ser los más apoyados por los profesionales que nos dedicamos al estudio de la nutrición, alimentación y el sistema digestivo. Es por esto que entran en juego los gastroenterólogos, inmunólogos y nutricionistas, para poder comenzar a enseñarle a los pacientes desde cero a poder llevar esta alergia, de la forma más normal y sana posible. 

No hay que olvidar que son personas con las que estamos tratando, quienes se ven sometidos a una carga emocional enorme por tener desconocimiento de la patología, y además de ayudar en cuanto a lo técnico, podemos ayudar como apoyo emocional. 

  • ¿Se puede consumir leche de otros animales o bebidas lácteas vegetales con el diagnóstico de alergia a la proteína de leche de vaca?

En Chile, el uso de leches de otros mamíferos como oveja, cabra, búfala, yegua, deben ser evitadas estrictamente, ya que existe alto riesgo de reacciones alérgicas cruzadas. Pero se ve mucho, que dentro de los grupos de apoyo de madres y padres de pacientes con APLV, han probado con algunos tipos de leches y no han tenido reacción. El tema es que mientras la evidencia siga mostrando que la reacción cruzada es un riesgo, no se debe recomendar por ningún motivo. 

Las bebidas lácteas de soya, arroz o almendras tampoco pueden ser consumidas por niños menores de un año, ya que no cubren sus requerimientos nutricionales. Además que existe reacción cruzada entre la leche y la soya en un 10 a 30%, por lo que tampoco se recomiendan. 

  • ¿Qué tipos de leches de fórmula existen?

Para el tratamiento de APLV existen dos tipos de fórmulas en el mercado, que se pueden utilizar si es que el paciente no puede ser alimentado con Leche Materna. 

  • Las fórmulas extensamente hidrolizadas (Althera de Nestlé y Nutrilon Pepti Junior) son fórmulas donde las proteínas han sido sometidas a procesos donde se rompen sus enlaces y las dejan de un tamaño bastante pequeño. Es baja en alérgenos, pero no es nula. Y se han visto pacientes reaccionar a estas fórmulas. Los hidratos de carbono son principalmente maltodextrina y polímeros de glucosa. Los lípidos o grasas son triglicéridos de cadena media y ácidos grasos esenciales. 

  • Las fórmulas elementales o aminoacídicas (Neocate de Nutricia, AminoMed de AliMed, Alfamino de Nestlé y Elecare de Abbott) se elaboran en base a aminoácidos, es decir, las partes más pequeñas de las proteínas. Se utilizan aminoácidos esenciales y no esenciales. Son libres de péptidos y proteínas de mayor tamaño. El problema con estas fórmulas es su sabor. Los niños no las aceptan tan fácilmente, ya que el sabor de algunos aminoácidos es metálico. Los carbohidratos son maltodextrina y los lípidos son triglicéridos de cadena media y ácidos grasos de cadena larga. 



Se debe tener en cuenta, que al momento que un paciente comience con alguna de estas fórmulas, puede sufrir un cambio en cuanto a sus deposiciones. Estas pueden volverse más pastosas, y no significa que esté reaccionando. De hecho es absolutamente normal. Estas fórmulas pueden inducir un aumento en los niveles de motilina, que es responsable del tránsito intestinal acelerado. Entonces, si el contenido del estómago, pasa a un intestino que ya está contrayéndose de forma rápida, se absorberá menos agua, se generará una digestión parcial de algunos componentes, como es el caso de un compuesto derivado de la bilis, y esto le dará una consistencia pastosa y un color verde. Y es normal.

Existen también fórmulas maternizadas, llamadas hipoalergénicas o HA. Estas fórmulas no están pensadas para pacientes con APLV. Y están absolutamente contraindicadas. Que algo sea hipoalergénico, en ningún caso significa que no tiene alérgenos. Lo que significa en realidad es que es “bajo en” alérgenos, pero no nulo. Por ende no pueden utilizarse. 

  • ¿Es necesario el consumo de leche en adultos?

No, nutricionalmente podemos llegar a los requerimientos de calcio con otros alimentos, pero la leche entrega una biodisponibilidad muy buena en cuanto a ese nutriente, cosa que los alimentos vegetales no presentan. Obviamente, si tenemos un niño que después de 4 o 5 años aún no supera la alergia a la proteína de leche de vaca (lo cual es raro), su dieta debería ser libre de leche de vaca y suplementado en calcio, porque no tendrá de dónde más sacar ese nutriente. 

Generalmente la APLV se supera al crecer el niño. Y terminan comiendo yogurt y tomando leche como todos, sin mayores inconvenientes. 




  • ¿Se puede curar la alergia a la leche?

Si, la alergia a la proteína de leche de vaca es una de las que se superan al crecer. El intestino se va volviendo más competente, y comienza a procesar de mejor forma las señales que envían los receptores de los enterocitos o células intestinales, evitando la reacción inmune, es decir, manteniendo la tolerancia oral. 

Hay otras alergias como alergia al maní, nueces, pescados y mariscos, tienden a perpetuar durante la vida adulta. 

  • ¿Qué alimentos se deben evitar con un diagnóstico de APLV?

La respuesta es bastante simple, lo que se debe evitar es la Leche de Vaca. El llevarlo a la práctica es lo complicado. Se debe evitar la leche de vaca en todas sus formas, además de todos sus derivados como mantequilla, manteca, crema de leche, leche evaporada, cultivada, condensada, manjar o dulce de leche, yogurt, cremas ácidas, quesos, quesillos y quesos frescos. Leches de soyas, lecitinas de soya (ampliamente utilizada en la industria alimentaria para sustituir el huevo), jugos de soya, etc. 

Se deben leer los ingredientes de absolutamente todo lo que la madre en dieta de exclusión, o el niño, vayan a ingerir. Nada puede contener leche, ni caseína ni soya. Es más fácil leer un poco antes y ver que cosas si se pueden comer, a enlistar lo que no se puede, porque la lista es realmente grande. Desde panes hasta chocolates con leche, embutidos hasta preparados apanados. 

  • Siendo nutricionista y alérgica, ¿Crees que ayudas más a tus pacientes sabiendo que lo entiendes perfectamente? 

 

Si, la verdad es que la empatía es parte importante de mi trabajo, y el haberlo vivido, hace que le tome el peso a cuando un paciente me dice “soy alérgico”, porque yo también lo soy. 

Siento que puedo acompañarlos de mejor forma en el camino de la alergia, ya que yo también la pase, aunque haya sido desde adulta. También viví con miedo de comer porque sentía que todo me hacía daño, también me impactó el diagnóstico, también vivo con varias restricciones alimentarias, por ende, puedo entender perfectamente lo que se siente cuando te dicen “Ay pobrecita ¿Entonces no puedes comer nada?”, la frase más frustrante en un principio, pero que después uno se lo toma con humor y dice, bueno, la gente no tiene porqué saber mi realidad, y seré yo el factor de cambio y de educación de la población que tengo a mi alrededor, para hacer más llevadero mi camino!

  • ¿Es cierto el refrán “En casa de herrero, cuchillo de palo”? ¿Eres tú misma quien controla tu alimentación? ¿Cómo es tu metodología ayudando a personas con APLV u otras alergias?

En mi caso, controlo yo mi alimentación en cuanto a mi alergia alimentaria y en cuanto a una alimentación saludable. Me diagnosticaron las alergias alimentarias que tengo (huevo, carne de vacuno, pescados azules o grasos y camarones) a los 27 años, soy yo quien me preocupo de que como, porque finalmente soy yo quien sabe más del tema dentro de mi familia. 

La metodología no es siempre la misma. Soy de las profesionales que trato de adaptarme a la vida del paciente. Si un paciente por algún motivo no come equis alimento, por supuesto que eso no lo incluyo dentro de su pauta de alimentación. 

Con los pacientes alérgicos, lo primero es contención, porque es algo complejo, y no es posible enseñarlo en 20 minutos en una consulta. Es por esto que trabajé y escribí un manual práctico sobre Alergia Alimentaria, para que mis pacientes pudieran tener material donde buscar información certera, al momento de encontrarse solos o sin su nutricionista al lado. También trato de darles mi contacto (teléfono, mail o Instagram), para que ante cualquier duda, puedan ubicarme y poder resolverlo. Siento que esto da un gran apoyo a las familias de alérgicos, a los intolerantes alimentarios y a los celíacos. Finalmente todos los que vivimos con alguna restricción alimentaria, sea cual sea, sabemos que significa. 

¿Qué consejo le darías a una persona que acaban de diagnosticar con alergias alimentarias de adulto? ¿Crees que hay una fórmula genérica para todo el mundo o cada uno debe de buscar la suya propia?

  • Mi primera recomendación es no asustarse. Esto es complicado, pero no imposible. 

  • Segundo, no culparse. Esto no te pasó a ti como castigo divino ni nada parecido. Si pasó, pues que mal, pero tienes que seguir viviendo. 

  • Tercero, busca ayuda. Tanto los médicos, nutricionistas, grupos de ayuda en redes sociales, podemos darte una mano al momento de enfrentarte al diagnóstico de alergia alimentaria. 

  • Cuarto, ten siempre contigo una tarjeta de identificación, así como la que hizo Alba, donde se diga quien eres, que alergia tienes, que hacer en caso de shock anafiláctico, donde llevarte si te encuentran inconsciente, número de contacto de emergencia. 

Luego de esto, tienes que tomar todas las herramientas que se te entregan y comenzar a avanzar en este mundo de los alérgicos, a conocer alimentos que puedes comer, sacar fotos de etiquetas, consultar con los especialistas, grupos de apoyo, etc. Lo más importante es que no estás solo en esto! Habemos muchos que podemos y queremos ayudarte :)! 



BIOGRAFÍA Y CONTACTO

Biografía:

Nutricionista chilena egresada el año 2013, diagnosticada con alergia alimentaria al huevo, carne de vacuno, pescados grasos y camarones el año 2017. 

Diplomada en Nutrición Pediátrica el año 2014. Diplomada en Microbiología e Inocuidad de Alimentos el año 2015. Y Diplomada en Enfermedad Celíaca, Intolerancia y Alergia Alimentaria el año 2018. 

Ha enfocado su carrera en tratar de ayudar lo más posible a pacientes en sus mismas condición, de alérgica alimentaria. Pero también, a pacientes con otras restricciones alimentarias, además de pacientes con diversas patologías crónicas a lo largo de todo el ciclo vital. 

Para esto creó dos manuales prácticos, uno sobre Enfermedad Celíaca y otro sobre Alergia Alimentaria, donde expone los aspectos básicos que uno debería conocer para enfrentar un diagnóstico de esta naturaleza, pero también consejos prácticos para hacer de la patología, algo más llevadero. 

Actualmente se desarrolla como Nutricionista de atención primaria en un Centro Médico privado, donde realiza consultas a pacientes de toda índole, y realiza visitas a domicilio a pacientes alérgicos que no puedan llegar hasta dicha institución, para hacer un apoyo mucho más integral. 

Andrea/Andy Valenzuela 

Nutricionista 

Diplomada en Enfermedad Celíaca, Intolerancias y Alergias Alimentarias

Instagram: @andyvalenzuelalorca

YouTube: www.youtube.com/c/FlandyVL